El Centro Universitario Reconquista Avellaneda comenzará a construirse en 15 días, y se prevé que sea inaugurado en otros 365, según indica el contrato que se rubricó ayer. “El año que viene volveremos a vernos para cortar las cintas de la nueva sede”, aseguró Cantard.

 

La Universidad Nacional del Litoral (UNL) dio otro paso fundamental en su presencia en la región, tras la firma del contrato de obra con el que se da inicio formal a la construcción de la nueva sede del Centro Universitario Reconquista Avellaneda. El hecho se concretó ayer, en un acto encabezado por el rector de la UNL, Albor Cantard, que contó con la presencia de los intendentes de Avellaneda, Dionisio Scarpín, y de Reconquista, Jacinto Speranza.

 

“En menos de 15 días vamos a estar comenzando una obra que estamos seguros será fundamental en el desarrollo de nuestra universidad en esta región”, introdujo el rector, quien redobló apuestas al asegurar que “el año que viene volveremos a encontrarnos para cortar las cintas” del nuevo centro.

 

El edificio estará ubicado en un predio de 10.000 metros cuadrados de superficie, al sur de la ciudad, que fue donado por la Municipalidad de Reconquista. La construcción prevista en esta primera etapa, y para la cual se destinarán 6,8 millones de pesos, prevé un moderno complejo destinado a actividades de investigación, servicios y enseñanza, desde el cual la universidad prevé fortalecer su oferta académica y la batería de propuestas que acompañan su funcionamiento, como la extensión, la cultura y la vinculación productiva.

 

El acto de la firma del contrato –rubricado entre Cantard y el titular de la empresa adjudicataria de la construcción, Rafael Perlo– se realizó en la actual sede que el Centro Universitario tiene en Reconquista. La obra, que será financiada con aportes del Programa Nacional de apoyo para el Desarrollo de la Infraestructura Universitaria, dependiente del Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios de la Nación, tiene un plazo de ejecución de 365 días corridos.

 

Esfuerzos compartidos

 

En su discurso, Cantard resaltó el relevante acompañamiento recibido de parte de las autoridades locales, “sin cuyo apoyo esta presencia de la universidad, que día a día queremos fortalecer en Reconquista, sería imposible”.

 

Por su parte, Scarpín advirtió que “este es el punto de partida de un largo camino que la universidad va a transitar en la región, porque creo que a partir de que este edificio esté funcionando las posibilidades de seguir avanzando en convenios, trabajos y carreras serán todavía mayores”.

 

Este año, la UNL comenzó a dictar en Reconquista la carrera de Enfermería, una demanda del medio social, y evalúa poner en marcha otras ofertas académicas que den respuestas a las necesidades de la comunidad.

 

“La universidad pública argentina y particularmente nuestra Universidad Nacional del Litoral no se limita en la formación de profesionales: apostamos a la extensión, a la presencia cultural, a la vinculación con el medio productivo”, advirtió Cantard.

 

En este sentido, el rector recordó el caso de la empresa Celint, incubada en la UNL, que tras un acuerdo con el Grupo Vicentín producirá celulosa microcristalina para su exportación, en un ejemplo que combina la investigación científica y el trabajo de vinculación con el sector empresarial y productivo.

 

En el marco de sus palabras, Speranza adelantó que “con una vinculación entre lo privado y lo público vamos a poder dar las respuestas que el presente y el futuro necesitan, y no pensamos en el futuro como un sueño, sino que estamos comprometidos con el cambio en el trabajo del día a día”.