La presidenta de la Nación, Cristina Fernández, vía videoconferencia, y el gobernador Antonio Bonfatti, encabezaron el lanzamiento del nuevo tractor John Deere fabricado con piezas nacionales, desde la planta de Granadero Baigorria, Provincia de Santa Fe.

En la oportunidad, Bonfatti expresó su satisfacción de que una firma asentada en territorio santafesino lanzara al mercado una maquinaria “con componentes argentinos”, y dijo estar “contento porque se sigue agregando valor a la producción y generando más empleo en la provincia”. Tras lo cual, la presidenta señaló que “hoy es un día de la industria, un día de generación de puestos de trabajo”.

Antes del corte tradicional de cintas, el gobernador santafesino dijo que sentía “una enorme alegría por poder compartir la reinauguración de esta planta que inició sus actividades en 1958 fabricando tractores”.

Asimismo, hizo hincapié en que “tener un porcentaje tan importante de piezas nacionales en una maquinaria de este tipo y fabricada en nuestra provincia es algo muy importante para Santa Fe”.

Del acto realizado en Granadero Baigorria participaron del acto el intendente de esa ciudad, Mario Rosales; el ministro de la Producción, Carlos Fascendini, los directivos de la empresa Aaron Wetzel y Pablo Hermann; y la diputada provincial Ericka Gonnet, entre otros presentes.

Por su parte, la mandataria nacional –que no viajó a Santa Fe por cuestiones climáticas– presentó desde la Casa Rosada la ampliación de la planta industrial Sensor de Totoras y la inauguración de una fábrica de calzado de Grimoldi en Pilar, provincia de Buenos Aires.

En la oportunidad, Fernández estuvo acompañada por el secretario de Transporte de la Nación, Alejandro Ramos, entre otras autoridades.

PLAN DE INVERSIONES

La nueva maquinaria de John Deere forma parte del plan de inversiones por 130 millones de dólares que incluye la contratación de 20 proveedores locales para incrementar la integración nacional de sus productos en un 60 por ciento, en tanto que el monto de la inversión se completará en el año 2015, cuando se concluya con la ampliación de la fábrica, la incorporación de equipamiento y una importante inversión en capital de trabajo.

El proyecto, además, prevé la producción de cosechadoras y un notable crecimiento en la fabricación de motores, con la incorporación de 300 puestos de trabajo de manera directa.