Así lo indico la titular de Amsafe Provincial, quien agregó que «me pareció muy dispuesta a discutir, a escuchar, agendó cada uno de los temas y manifestó su voluntad de tener una actitud abierta».

Por ser una reunión de presentación, se extendió más de lo previsto. Tres horas duró el primer encuentro entre la flamante ministra de Educación, Claudia Balagué, y la secretaria general de Amsafe Provincial, Sonia Alesso, que estuvo acompañada por otros gremialistas. Ambas salieron del despacho de la funcionaria conformes con el desarrollo de la reunión.

«Tuve una buena impresión (de Balagué). Me pareció muy dispuesta a discutir, a escuchar, agendó cada uno de los temas y manifestó su voluntad de tener una actitud abierta», dijo Alesso, al terminar el cónclave que comenzó a las 10 y finalizó a las 13.

Amsafe le planteó a la funcionaria las «deudas pendientes» del ciclo lectivo que cierra, entre ellos, el salario. «Nos dijo que iba a trasladar el tema y tomó nota, pero los temas no se resolvieron hoy», aseguró.

La sindicalista también interiorizó a la ministra sobre los temas pedagógicos como los concursos pendientes en el nivel superior y el área No Formal, la capacitación docente en servicio, la implementación de la Ley de Educación Sexual Integral en las escuelas, la necesidad de resolver las situaciones generadas a partir de la reforma curricular en secundaria, la polémica metodología con respeto a los sumarios docentes, entre otros.

«La ministra se comprometió a tratar de dar una respuesta sobre cada uno de los temas y asumió una actitud de diálogo con cada uno de ellos. Esperamos que esto se cumpla», dijo la titular de Amsafe.

Con relación a la reforma curricular, señaló que se realizará una mesa de trabajo -sin fecha fijada- para hacer un «balance» de los problemas surgidos a partir de la aplicación de los cambios en el nivel secundario.

Por su parte, la nueva funcionaria calificó a la reunión como «muy positiva» y dijo que «estuvimos conversando 3 horas en base a una agenda de temas interesantes. Hemos abordado una cantidad de problemáticas educativas, desde la reforma curricular hasta los problemas edilicios de las escuelas, entre otros».

Reiteró que con relación al salario se empezará a trabajar «lo antes posible» pero «no durante este año sino a partir del próximo para llegar con tiempo al inicio del año escolar».

También dijo que acordó con Amsafe efectuar en enero una serie de reuniones específicas para abordar cada una de las cuestiones planteadas hoy por el gremio. «Reconocemos que hay problemas que son reales y atendibles», evaluó.

Mal cierre

Antes de entrar al despacho de la ministra, Alesso fue más dura con relación a la cuestión salarial y advirtió que «hubo un mal cierre de año» por «el incumplimiento del gobierno provincial en la reapertura de la paritaria salarial en el segundo semestre».

«De no tomarse los recaudos necesarios (a principios de 2013), va a ser un comienzo conflictivo porque hubo un mal cierre de este año -insistió-, ya que los docentes y profesores sufrieron un deterioro de su salario debido a que la inflación estuvo por encima del aumento otorgado».

Según Alesso, el salario de los docentes de Santa Fe «era uno de los mejores entre el año pasado y el inicio de 2012, pero luego quedó retrasado». Y mencionó las cifras aportadas por los economistas de la Confederación de Trabajadores Argentinos (CTA) que asegura que la inflación de este año ronda el 25 % para nuestra región. «Además, aumentaron los impuestos provinciales, ha habido subas del transporte, de la canasta alimentaria, de los alquileres. Pero desde Amsafe no solamente discutimos salarios en base a la inflación, sino si es justo que una maestra de grado gane 4.000 pesos», recalcó.

Que se corra el inicio de clases

A las 13, la ministra continuó la ronda de presentación con los dirigentes del sindicato que nuclea a la docencia privada. Pedro Bayúgar, del Sadop Sante Fe, dijo antes de entrar que iban a plantear la situación salarial, el demorado concurso de supervisores de la educación privada, los escalafones de ingreso y ascenso, entre otros.

Asimismo, le iba a pedir a Balagué que se corra el inicio de clases -previsto para el 25 de febrero- porque «para esa fecha las escuelas no alcanzan a organizarse internamente», subrayó.