Cerca de las 7.30 Hs los detenidos se organizaron para tomar por asalto la celaduría de la Unidad Regional IX y mantienen un motín donde hubo quema de colchones y rotura de camas con las que hicieron chuzas para defenderse del posible ingreso de policías a la zona donde están los detenidos.

 

A los pocos minutos se conoció la noticia de que los detenidos rompieron las puertas de las celdas y quedaron todos en un mismo lugar. Allí tres de los detenidos fueron golpeados, aparentemente por los organizadores del motín.

 

Minutos antes de las 10 de la mañana llegó a la Unidad Regional IX el Juez Penal de Instrucción Virgilio Palud que fue convocado a pedido de los detenidos y también de los policías que necesitaban órdenes para poder actuar.

 

Cuando salió Palud confirmó que estuvo hablando con los detenidos y una de las cosas que le pidieron era «mejores condiciones para estar detenidos» porque ese lugar no tiene condiciones para que viva una persona. También confirmó que «Juan Navarro está como líder de la protesta».

 

Navarro le habría pedido al juez que lo dejara en libertad y con eso calmaba la situación, algo a lo que no accedió Palud y allí le Navarro le dijo que «entonces no negocio más» y l juez decidió retirarse.

 

Finalmente el juez también confirmó que «esa celaduría tiene capacidad para 25 personas y en este momento hay como 60».

 

Minutos más tarde la prensa pudo ingresar a la celaduría para que los presos puedan hacer el descargo público sobre la situación en la que están viviendo (ver video).

 

Los policías más antiguos de la institución aseguran que es «el primer motín de dimensiones en toda la historia de Reconquista».

 

El Juez Federal de Reconquista Aldo Alurralde también se hizo presente y confirmó que «los detenidos no quieren el traslado» porque la mayoría de ellos son de la ciudad de Reconquista y tienen aquí sus vínculos familiares. «Esto pasa porque no tenemos una cárcel federal y la más cercana es la de Resistencia», reflexionó.

 

Fin del motín

 

A las 15 Hs los policías volvieron a tomar el control de la situación y luego de trasladar algunos detenidos a la Comisaría de Avellaneda se terminó el motín.

 

Ahora comienza una investigación para determinar quiénes son los responsables de la revuelta y aplicar las penas correspondientes. También es hora de que haya cambios porque es inadmisible que 55 detenidos estén en celdas que solo admiten 25 personas.