A escasos días del inicio del mes de marzo y del ciclo lectivo, la mesa de negociación docente todavía no discutió ni una propuesta de incremento salarial. Tampoco hubo ofertas a los empleados de la administración central o de la salud.

 

La semana hábil que empieza este miércoles será breve pero intensa en materia de discusión paritaria en Santa Fe. A escasos días del inicio del mes de marzo y del ciclo lectivo, los docentes todavía no recibieron propuesta alguna de incremento salarial. Tampoco hubo ofertas a los empleados de la administración central o de la salud. Las negociaciones –al menos en el caso del sector educativo– se concentrarán en los tres últimos días laborables de febrero y la gestión de Omar Perotti deberá presentar una oferta satisfactoria si quiere asegurar que las clases efectivamente comiencen el 2 de marzo, en línea con el pedido del gobierno nacional.

 

Durante la semana pasada, el Ejecutivo provincial hizo un guiño a los gremios atendiendo uno de sus reclamos: comunicó que los sueldos de febrero se liquidarán con la diferencia porcentual del 3,8% correspondiente a la cláusula gatillo por la inflación de diciembre, algo firmado con el gobierno anterior y que los trabajadores pedían que la nueva gestión cumpla.

 

La segunda reunión de la paritaria docente se realizó el jueves 20 de febrero por la tarde.

 

Este miércoles, el ministro de Educación de la Nación, Nicolás Totta, presentará la primera propuesta para fijar el salario inicial de la restaurada Paritaria Nacional Docente. Tras ese anuncio, y siguiendo sus números como referencia, llegaría la oferta para los docentes santafesinos.

 

Sonia Alesso, secretaria general de Amsafé, evitó subir el tono de la discusión tras las dos primeras reuniones. Eso sí, pidió que el debate y la negociación se dé «en la mesa, que es el lugar que corresponde, y no a través de los medios».

 

En diálogo con la prensa a la salida de la primera reunión de la paritaria de salud –el pasado viernes– el secretario de Trabajo de la provincia, Roberto Sukerman, ató la posibilidad de otorgar un incremento salarial significativo a la la sanción de la Ley de Necesidad Pública que se discute en la Legislatura. «Nosotros queremos recuperar el poder adquisitivo de los salarios», aseguró.

 

Por su parte, Néstor Rossi, referente de Amra, dijo: «Me voy con un empate. Nos estamos conociendo y recién es el primer round. Además es una gestión nueva, después de 12 años, y tiene que entender bien lo que quedó y lo que estamos pidiendo para el futuro», planteó.

 

La administración central y la situación de los contratados

 

En el caso de la paritaria de la administración central –que también comenzó el viernes–, la situación es todavía más compleja, porque a la negociación salarial se suma la discusión por el futuro de los 1300 trabajadores contratados que tiene la Provincia, y que desde diciembre están en una situación de total incertidumbre.

 

«Es algo que nos preocupa y que no pudimos resolver el año pasado», dijo Molina tras el encuentro. «El gobierno está dispuesto a hacer una evaluación seria del tema y lo pasó a la comisión técnica para hacer un análisis y dar una resolución a la brevedad», agregó. Si bien en la primera reunión no se habló de la cantidad de empleados estatales que se encuentran en dicho escenario -el gobierno de Miguel Lifschitz relevó unos 1.300-, sí se habló de los criterios que podrán contemplarse para el pase a planta. «Es razonable y lógico que el gobierno quiera revisar los contratos que se hicieron después de los resultados electorales», sostuvo el gremialista.