Las empleadas domésticas dedicadas a tareas de limpieza mantienen en noviembre los mismos valores salariales fijados en septiembre, según los datos oficiales publicados por Arca y la Comisión Nacional de Trabajo en Casas Particulares. No hubo nuevos acuerdos paritarios, por lo que los haberes permanecen congelados en todo el país.

 

El esquema vigente establece que el personal con retiro cobra $3.052,99 por hora, mientras que quienes trabajan sin retiro perciben $3.293,99. Estas cifras corresponden al salario básico y, en la práctica, suelen ser superiores, ya que los valores reales pagados en el mercado oscilan entre $6.000 y $8.000 por hora, según la localidad y la carga horaria.

 

Además de las tareas generales, el régimen contempla distintas categorías: supervisores, cocineros, cuidadores y caseros, cada uno con su escala diferenciada. El adicional por antigüedad, equivalente al 1% anual sobre el salario, y el plus por zona desfavorable del 30%, se suman al sueldo básico y buscan equilibrar diferencias regionales y reconocer la permanencia en el puesto.

 

Las autoridades laborales insisten en que los empleadores deben respetar las escalas oficiales y realizar los aportes correspondientes para garantizar derechos previsionales, de salud y licencias. En un contexto inflacionario y de espera por nuevas negociaciones, el sector aguarda definiciones del Ministerio de Trabajo.

 

 

A estos valores deben agregarse los incentivos previstos por ley, como el 1% anual por antigüedad y el 30% por zona desfavorable, aplicable en regiones patagónicas y zonas incluidas por la normativa nacional.