Las investigaciones llevadas a cabo desde la Región II de Educación – por disposición del Ministerio de Educación – determinaron la intervención de la Escuela Nº 6002 de la norteña localidad de Villa Guillermina.

 

Ante la necesidad de ampliar el sumario ordenado contra Patricia Bacarezza, directora de la Escuela N» 6.002, desde la supervisión se afirma que la directora del establecimiento «habría incumplido funciones tendientes a asegurar el adecuado funcionamiento de los servicios asistenciales asignados a la escuela. Además «cumplió de modo deficiente las funciones de habilitado pagador, de todo lo relacionado con pagos, registraciones contables, rendiciones de cuentas, devoluciones, conciliaciones bancarias, de las partidas correspondientes a: copa de leche, comedor escolar y otras».

 

Bacarezza no habría «asesorado adecuadamente a la Asociación Cooperadora en rendiciones mensuales de cuentas de copa de leche y comedor, finalmente se le atribuye «la presunta no aplicación del Manual Operativo de Menúes de Comedor y Copa de Leche».

 

Ante esta situación, la Región II de Educación sugiere «declarar a la Escuela Nº 6002 «General José de San Martín», en estado de reorganización», aduciendo que «se dificulta garantizar el normal funcionamiento de la Escuela, generándose un caos institucional de organización y administración de los recursos humanos, pedagógicos, manteriales, funcionales y financieros», lo que motivó ampliar la investigación con desplazamiento provisorio de su cargo de directora a Patricia Bacarezza. Hasta la finalización del sumario, el establecimiento permanecerá intervenido según disposición Nº 177 del 4 de Noviembre de 2011.

 

Si bien esta situación irregular data desde hace meses, ni las autoridades de la Región II, ni del Nodo Región 1 Reconquista se brindó información, salvo la que suscribimos a partir de la investigación de este medio.

 

Yendo al plano de las irregularidades que se detallan en el informe de las supervisoras: Nanci Del Fabro y Norma Barreto, investigación requerida por la docente Patricia Lamazón, podemos señalar lo siguiente: No hay matricula actualizada de comensales asistentes al comedor escolar; se observa además que en vacaciones de invierno, días de lluvia y paros docentes, no se registra asistencia de alumnos al comedor; no se puede determinar quienes son los comensales porque de al documentación colectada , sólo se especifica asistencia en el mes de abril,, no así en marzo, mayo, junio, julio, agosto y setiembre de 2011, además los niños llevan vasos y tazas de sus hogares y deben también higienizarlos; el menú para ambos servicios (comedor y copa de leche) no se encuentra expuesto a la vista en el comedor escolar. En cuanto al menú se detectó que no se respeta el manual operativo por lo que en el mes de junio de 2001, sobre un total de 21 días, 14 días se sirvieron comidas con salsa, cuando conviene suministrar no más de dos veces y de manera alternada.

 

Otro dato se refiere a las partidas de comedor y copa de leche, y tomando como testigo el mes de junio y agosto de 2011, «se observa que las planillas mensuales de rendición no poseían ninguna firma ni sello de los responsables (cooperadores, directora y ecónomo).

 

Varios de los proveedores son de Villa Guillermina, en tanto que en entrevistas testimoniales con los cooperadores, manifestaron que se compra sólo a viajantes o comerciantes. Hay boletas sin fecha; no todos los comprobantes indican condiciones de ventas, precios unitarios. Existen boletas que tienen enmendadas la fecha sin la salvedad correspondiente. Los comprobantes no llevan las firmas de los responsables.Se observa que se rinde por el total que envía el Ministerio, pero no se devuelve los importes de raciones no utilizados. No se realiza compulsa de precios. No se realiza control de mercaderías que ingresa a la escuela. No se solicita remitos a los proveedores. Las rendiciones las realiza el Ecónomo fuera de tiempo e inconsultas, según expresa en entrevista testimonial porque la Directora ni los cooperadores las entregan en forma completa. Hay productos facturados que no se dan en el menú de comedor y copa de leche (frutas, pollos, latas de choclos cremosos y enteros, milanesas, queso barra, yogur). El Ecónomo manifestó que «no maneja la carpeta de refuerzo nutricional, sí las boletas, y que las milanesas se elaboran en la escuela, pero sin embargo hay facturaciones de 52 y 30 kilogramos de milanesas.

 

El informe de Barreto y Del Fabro es contundente y responsabiliza directamente a la directora del establecimiento hoy intervenido por las irregularidades detectadas, también a la Asociación Cooperadora por una «inadecuada rendición de cuentas de las partidas como responsables con la Administración Pública, ya que no fiscalizaron las mismas. También en el Ecónomo recae la responsabilidad por desmanejos.

 

Las supervisoras actuantes concluyen «se proceda desde la superioridad, aplicar medidas disciplinarias correspondientes a los responsables de acuerdo a la legislación vigente».

 

Uno Reconquista