El vocero de la Presidencia comunicó que el actual titular de Defensa pasa a ocupar el cargo que hasta ahora tenía Nilda Garré, quien fue propuesta para ser embajadora ante la OEA. La titularidad del bloque oficialista en Diputados quedará en manos de Juliana Di Tullio.

 

La Casa Rosada convocó sorpresivamente a una conferencia de prensa, en la que el vocero presidencial, Alfredo Scoccimarro, anunció las modificaciones en el gabinete nacional.

 

En un escueto mensaje, el funcionario informó que Arturo Puricelli, hasta este jueves al frente de la cartera de Defensa, pasará a hacerse cargo de Seguridad. En tanto, quien hasta ayer ocupaba ese puesto, Nilda Garré, fue propuesta para ser la embajadora argentina ante la Organización de los Estados Americanos, cuestión que deberá contar con el aval del Senado.

 

El nuevo nombre en el equipo de colaboradores más cercanos a la presidente Cristina Kirchner es el de Agustín Rossi, quien será el nuevo ministro de Defensa. Su nombramiento ocurre un día después de que el legislador reclamara que un civil esté al frente de la policía de Rosario, que fue fuertemente cuestionada por los presuntos vínculos con narcotraficantes.

 

La salida de Rossi de la Cámara de Diputados deja al bloque del Frente para la Victoria sin su presidente. Según el sitio Parlamentario, el diputado confirmó que Juliana Di Tullio ocupará ese lugar, al menos hasta que se renueve la cámara.

 

Scoccimarro precisó que los cambios se oficializarán el próximo lunes.

 

Garré y Puricelli, entre cuestionamientos y denuncias

 

El Proyecto X; la inédita protesta de Gendarmes y Prefectos por una mala liquidación de haberes, que se produjo en octubre del año pasado y que derivó en la renuncia de Raúl Garré, hermano de Nilda, por entonces jefe de Gabinete de Asesores de la cartera; rispideces con el secretario de Seguridad, Sergio Berni; con su par bonaerense, Ricardo Casal, y con buena parte de la Policía Federal tiñeron el mandato de Garré durante su gestión al frente de una de las carteras más sensibles.

 

En tanto, entre las críticas que debió afrontar Puricelli se mencionaron irregularidades en el abastecimiento en las bases antárticas de la Argentina y el pago de sobreprecios por la reparación del rompehielos Almirante Irízar.

 

La figura de Puricelli también fue cuestionada luego de la retención de la Fragata Libertad, el buque escuela de la Armada, durante 70 días en un puerto de Ghana a raíz de un embargo que presentó el fondo buitre NML-Eliott Management.

 

La permanencia de esa histórica embarcación en el país africano ocasionó una crisis en el Gobierno, porque tanto la Cancillería como Defensa fueron sindicados por no tomar las correspondientes precauciones en el viaje para evitar embargos económicos.

 

En enero último, Puricelli debió responder por el hundimiento del buque Santísima Trinidad mientras se encontraba amarrado en la Base Naval de Puerto Belgrano, un hecho que vinculó a un «sabotaje».

 

«Cuando la Presidenta me pregunte, se me va a caer la cara de vergüenza, sinceramente, de decirle que se hundió un buque amarrado en el puerto», admitió en ese momento.