El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, y el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, encabezaron este miércoles la firma de los contratos correspondientes a la provisión de cañería y construcción de la etapa II del Gasoducto del Noreste Argentino (GNEA), que incluye a Reconquista, Avellaneda, Malabrigo y otras localidades del norte santafesino. El Intendente Amado Zorzon participó del acto

 

La etapa II comprende la construcción de los tramos troncales y ramales de aproximación así como las cañerías en tres provincias, Formosa, Chaco y Santa Fe. El GNEA nacerá en el gasoducto Juana Azurduy y abastecerá 168 localidades del NEA, contará con 4.144 kilómetros de gasoductos troncales y de aproximación, ocho plantas compresoras y 165 plantas reguladoras.

 

Se construirán también más de 15 mil kilómetros de redes domiciliarias, con una inversión total de 25 mil millones, que permitirá a la región tener gas natural por redes.

 

En ese marco, De Vido sostuvo que los contratos firmados «no son solamente importantes para la industria de la construcción, también se firmó la provisión de gas para la industria siderúrgica» y recalcó que las obras totales ocuparán a más de 25.000 personas.

 

«Capitanich fue un gran impulsor de este proyecto, recuerdo cunado asumió el presidente boliviano Evo Morales que fuimos a La Paz a impulsar este gasoducto, desde donde fluirán 27 millones diarios de BTU (Unidad Térmica Británica)», repasó el titular de Planificación. «Es una obra muy compleja, hay que abrir fronteras, no había caminos pavimentados. La traza prevista en 2003 no pasaba por Formosa, y se trabajó muchísimo para que se ordenara la traza», aseveró, tras afirmar que la Etapa II implica un desembolso de 11.348 mil millones del Estado Nacional, que beneficiará a 80 localidades.