El índice IPOD de CAME, que mide la diferencia promedio entre el precio de góndola y origen para una canasta de 20 alimentos agrícolas, aumentó 6% con relación a julio, cortando tres meses consecutivos de mejoras.

 

La precios de los alimentos agrícolas desde que salen del productor y hasta que llegan al consumidor se multiplicaron por 5,5 veces promedio en agosto, mostrando un aumento de 6% en esa diferencia en relación a julio (5,2 veces). El deterioro se explica por la fuerte caída de los valores al productor en algunos vegetales como el Pimiento, la Lechuga, la Frutilla, la Zanahoria, la Manzana, la Naranja y el Brócoli, principalmente.

 

Así surge del Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) que elabora el Área de Economías Regionales de CAME para una canasta de 20 alimentos agrícolas. Con la suba de la brecha, en agosto se cortaron tres meses consecutivos en los que el IPOD venía mostrando leves mejoras.

 

La participación del productor en el valor de góndola también descendió en el mes: para el promedio de los alimentos agrícolas y ganaderos relevados en agosto, el agricultor sólo recibió el 25,4% del precio que pagó el consumidor, con una pérdida de 2,5 puntos porcentuales de participación frente a julio y volviendo así a los importes de junio.

 

Los productos agrícolas con mayores brechas de precios en el mes fueron: la Pera, con una diferencia de 13,6 veces; la Manzana, con una distorsión de 12,1 veces; el Limón (10,5 veces), la Naranja (9,0 veces) y la Mandarina (7,7).

 

En cambio, los productos donde menos se multiplicaron los importes desde que salieron del campo y hasta que llegaron al consumidor fueron: la Papa, con una brecha de 2,25 veces, la Cebolla, con una diferencia de 2,39 veces; la Calabaza, 2,47 veces, y el Repollo con 2,98.